viernes, 27 de julio de 2007

México se solidariza con la causa del pueblo

Numerosas organizaciones sindicales, campesinas y políticas populares de todo México dieron a conocer una declaración repudiando la nueva ofensiva represiva lanzada el lunes 16 de julio en Oaxaca por el gobierno de Ulises Ruiz Ortiz.

“A Oaxaca la gobierna un sátrapa envalentonado al que las autoridades federales, por debilidad política, no han tratado de remover. El PRI se opone a la remoción de Ulises Ruiz y el gobierno panista necesita de la alianza con el PRI para sacar adelante sus proyectos antinacionales. El gobierno federal, con la pesada carga de su ilegitimidad, sostiene a Ulises Ruiz, le garantiza impunidad, y a cambio recibe reconocimiento de éste en una alianza vergonzosa, pero inocultable.
“Los agravios de Ulises Ruiz a un pueblo decidido a no dejarse vencer incluyen alrededor de 25 asesinatos, decenas de detenidos llevados a cárceles de otros estados, cientos de ciudadanos golpeados y dañados en su patrimonio.
“En el fondo del conflicto oaxaqueño están la pobreza extrema, la marginación, la falta de oportunidades para una vida digna, los salarios miserables cuando los hay, la migración forzada, los cacicazgos ancestrales, la impunidad, entre muchos otros; flagelos que no son atendidos por los gobiernos, ni estatal ni federal. La población se rebela contra esa situación asfixiante y los gobiernos, sin capacidad ni soluciones políticas, recurren a la represión”.

viernes, 20 de julio de 2007

Asesinan líder indígena en Brasil

El Consejo Indigenista Misionero (CIMI) denunció la muerte de otro líder indígena en el estado brasileño de Mato Grosso do Sul.

Ortiz Lopes, de 46 años y líder del pueblo Guaraní-Kaiowá, fue asesinado el domingo pasado con varios tiros que habrían sido realizados por asesinos al mando de hacendados de la región. El CIMI señaló que se trata del vigésimo asesinato en el estado durante este año, lo que iguala el número de asesinados durante todo el 2006.

En enero de este año, Ortiz participó junto a 300 personas de la reocupación de la tierra indígena Kurussu Ambá, en el municipio de Coronel Sapucaia, en la frontera con Paraguay. Una semana después de la ocupación, el grupo fue violentamente expulsado del lugar por una operación conjunta entre policías militares y funcionarios de seguridad de la hacienda Madama, una de las invasoras de la tierra indígena.

Llama la atención que ningún agresor fue detenido, en cambio 12 indígenas - inclusive niños - fueron llevados a la delegación de policía de Amambai, y 4 de ellos, los principales líderes del pueblo, permanecen detenidos acusados de robo e invasión de tierra.

Según religiosos, antropólogos, líderes indígenas y de los derechos civiles, los sucesivos gobiernos brasileños hasta ahora no han delimitado apropiadamente las reservas indígenas y hoy unas 40.000 personas viven en unas 50.000 hectáreas, un espacio insuficiente para cubrir las necesidades de su economía agrícola tradicional.

"Los índices de pobreza, desnutrición, enfermedades infecciosas, suicidios y asesinatos entre las comunidades Guaraní-Kaiowá están entre las más altas de Brasil," según cifras oficiales del CIMI.

En mayo la Conferência Nacional dos Bispos do Brasil (CNBB) denunció que el obispo Manuel João Francisco, de la ciudad de Chapecó, está bajo amenazas de muerte por defender a los pueblos Guaraní, Kaingang y Xokleng en su lucha "por la demarcación y garantía de posesión de sus tierras".

jueves, 19 de julio de 2007

Originarios: una llama que se enciende

Durante siglos de opresión se ha tratado de ocultar que en nuestra Argentina y en nuestra América todavía existen los pueblos originarios.
Desde la llegada de Colón hasta las posteriores conquistas del imperialismo europeo, los nativos de América han sido siempre alejados, esclavizados, oprimidos y masacrados.
En la época independentista de las colonias americanas, revolucionarios como Moreno, Belgrano y otros más que liberaron a nuestra Patria Grande, creían y luchaban por el reconocimiento de los pueblos originarios intentando ofrecerles el lugar que se merecían de tener en sus tierras.
Es noticia hoy en día – después de tantos años de opresión blanca hacia los mestizos – que en muchos países americanos el movimiento indigenista resurja, reclamando por sus derechos y peleando por ser reconocidos.

El
Subcomandante Marcos en México encabezando el Ejército Zapatista de Liberación Nacional.
Hugo Chávez en Venezuela, un presidente mulato.
Evo Morales, primer presidente boliviano de origen aymara.
Rigoberta Menchú Tum, premio Nobel de la Paz y candidata a presidente de Guatemala.
Como ellos, muchos otros más que luchan por los derechos de los nativos de nuestra América.

Mientras tanto, en el mes de junio se llevó a cabo en Rosario (Santa Fe, Argentina) el Primer Encuentro Nacional, donde asistieron 15 pueblos y más naciones originarias.
Una joven qom afirmaba que el actual presidente argentino Néstor Kirchner "hace oídos sordos a los pobres". Daniel, otro joven qom comentaba sobre la
situación organizativa del pueblo.
Fidelina Díaz, una joven samijyé también contaba las
dificultades de ser nativa americana en nuestro país.
Por otro lado, Pedro Coria, lonco de la comunidad Nahuel Ancá de Parera describía
la situación de los ranqueles hoy en Argentina.
Aurelio Velárdez, integrante de la comunidad diaguita de Tucumán contaba
sobre su pueblo, su organización y sus opiniones.

Pero con otros apellidos, quizás otros tonos de piel, con idiomas antiguos que siguen hablando junto al castellano, con otras creencias, mitos y religiones, siguen siendo argentinos, y sobre todo son americanos. Sin embargo son olvidados y dejados de lado. Solamente se los va a buscar cuando haya que votar, pero ni siquiera por eso el gobierno los reconoce ni los respeta.



"El mundo que queremos es uno donde quepan muchos mundos. La patria que construimos es una donde quepan todos los pueblos y sus lenguas, que todos los pasos la caminen, que todos la rían, que la amanezcan todos." (Subcomandante Marcos)